La desarrolladora mexicana quiere ser una alternativa para los habitantes de las zonas marginales.
Un hogar para Bashir
El gobierno indio busca minar la pobreza patrimonial vía la construcción de casas
Por: Alejandra Sánchez Inzunza / Nueva Delhi
Bashir vive con su esposa y sus dos hijos a las afueras de Nueva Delhi, en un cuarto de 20 m2 hecho de lámina. Junto a él, otras 100 familias cercanas a la zona de Gurgaon construyen sus viviendas con los materiales que encuentran en la basura, como madera, aluminio, ramas de árboles.
"Lo importante es cubrirse, sobre todo cuando viene el frío, o resguardarse del sol en verano", dice Bashir, mientras trata de prender una fogata.
Al igual que Bashir, otros 65 millones de indios -25% de la población- necesitan una casa donde vivir. La pobreza patrimonial resulta uno de los problemas más graves en India, y para combatirla, el gobierno vio como opción el modelo de vivienda de interés social con el que la desarrolladora mexicana Homex hizo su arribo al país.
Las viviendas que construirá Homex pretenden ser una alternativa para gente como Bashir, que vive en barrancas a las afueras de Nueva Delhi, en lugares tan grandes como el suburbio de Gurgaon, donde al lado de enormes corporativos y residencias de lujo con campos de golf y piscina, se levantan humildes casas que más bien parecen chozas.
Homex ya inició la construcción de 400 casas de interés social en los estados de Jammu y Cachemira, en el norte del país que atraviesa el río Ganges, y analiza continuar el desarrollo en la capital, Nueva Delhi. Según su informe anual 2008, la operación en India es "poco significativa", pero el potencial es inmenso.
La mexicana tiene una alianza por 1,500 mdd con Daksh Builders and Developers (DBD), la constructora líder en India. Así crearon Homex India, empresa pionera en este país donde la burbuja inmobiliaria hace cada vez más difícil adquirir terrenos y cada año sube hasta 100% el precio de la vivienda.
Aunque DBD lleva 40 años especializada en la construcción de villas de lujo y casas residenciales, su alianza con Homex pretende justo lo contrario: ir por el nivel medio bajo, con distintas opciones de crédito.
El gobierno indio aceptó encantado. Desde que se aprobó el proyecto en 2006, Homex cuenta con el apoyo de las autoridades y las cámaras de Industria y Vivienda que buscan incentivos para la construcción y se habla de crear un instituto de crédito similar al Infonavit.
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